RIVERO MARTÍN nace como la ilusión de uno de sus socios fundadores en crear una empresa para asesorar de una manera racional, ética y con garantías, tanto a pequeñas y medianas empresas como a autónomos. Su afán en el momento de su creación es, debido a una falta de conciencia fiscal en nuestro país, a pesar de que ya llevaban varios años con sistemas de recaudación por parte del Estado y otras Administraciones, generar en el pequeño y mediano empresario y autónomo dicha conciencia con dos objetivos claros:
1) Su seguridad jurídica y económica.
2) Dentro de esa seguridad, el mayor ahorro impositivo posible con la mejor rentabilidad económico-fiscal.
Debido a los avances tecnológicos tan veloces que han transcurrido en estos 30 años de nuestra historia, hemos tenido que adaptarnos, tanto como empresa de gestión de impuestos como nuestros propios clientes ante una Administración con más recursos para perseguir el fraude fiscal sin menoscabar nuestro verdadero objetivo, que es un equilibrio entre la seguridad jurídica de nuestros clientes y su optimización fiscal.
Los valores de la empresa se podrían resumir en una conciencia de colectivo como sociedad que nos lleve a todos a colaborar con el sostenimiento de los derechos básicos de los ciudadanos de acuerdo con nuestra capacidad económica. A nuestros clientes, les tratamos de explicar qué es realmente un impuesto/tasa que supone un coste para su negocio y qué es un impuesto en el que ellos son un mero mecanismo de recaudación. Por ejemplo, es claro que el Impuesto sobre Sociedades es un coste para una sociedad mercantil. Sin embargo, el IVA lo único que hace es recaudar a consumidores finales para luego liquidarlo a Hacienda, siendo meros transmisores de esos fondos, ya que son los consumidores finales los que soportan este coste impositivo.
¿Por qué este intento de concienciación? Porque queremos que nuestros clientes vean su carga impositiva real, ya que, en España, al tener que intervenir las empresas en la gestión y recaudación de varios impuestos que son sobre la ciudadanía (trabajadores, consumidores, etc.), hay una sensación de fiscalidad muy elevada, percepción razonable por parte del empresario porque ve cada trimestre que de sus arcas salen grandes cantidades de dinero.
Todo esto resume el valor más importante de RIVERO MARTIN que es un trato familiar y personalizado a nuestros clientes sin escatimar ni tiempos ni recursos para atenderles correctamente. Esta filosofía nos ha llevado a ser una empresa de ámbito pequeño, pero con una fidelidad de nuestros clientes que en muchos de los casos se aproxima a los mismos años que tenemos de historia.